Expertos aconsejos mantener relaciones sociales para tener una vejez más sana
Sept, 2018
DV Y AGENCIAS
Domingo, 26 agosto 2018, 15:46
No solo es necesario mantener un estilo de vida saludable, la mente activa o una actitud positiva para tener un envejecimiento saludable. Muchos expertos hacen hincapié ahora en la importancia de las relaciones sociales, de mantener amistades y estar en buena compañía.
Así lo defiende el profesor de la Universidad de Navarra y psicólogo clínico del Servicio Navarro de Salud David Brugos que asegura que «el envejecimiento saludable tiene que ser activo».
«Además de llevar un estilo de vida sano con ejercicio, evitando el sobrepeso, sin tabaco y moderando el consumo de alcohol, para un envejecimiento exitoso y positivo es clave mantener la mente activa, una actitud positiva y relacionarse con otras personas».
Según Brugos, es necesario que el funcionamiento cognitivo (pensamiento, memoria) se conserve el máximo tiempo posible y en las mejores condiciones, retrasando el deterioro que pueda aparecer. «Para ello, hay que buscar ambientes estimulantes que exijan comunicarse, resolver problemas, dialogar, aprender cosas nuevas, porque la máquina de nuestra mente tiene que entrenarse».
No al paternalismo
Por otro lado, la persona que mantiene una actitud positiva y optimista, y aquella que tiene confianza en su capacidad de afrontar problemas «muestra mayor implicación con su salud, más bienestar vital y calidad de vida», explica.
Además, es necesario mantener «relaciones sociales positivas y agradables, que permitan sentirse integrado y apoyado». Según este experto, el apoyo social es clave en la salud y adaptación a la enfermedad e incluso se ha comprobado que las personas que se encuentran más solas, tiene un riesgo mayor de mortalidad».
Este psicólogo clínico explica que durante mucho tiempo se ha transmitido una imagen social negativa de las personas mayores y del hecho de envejecer. Esta percepción hace que la sociedad muestre actitudes a veces «sobreprotectoras y paternalistas» con las personas mayores, «haciéndoles creer que ya no son útiles».